ESTUDIO DE PROPORCIONALIDAD DE FIRMAS

Llamamos escala a la proporción entre las dimensiones reales de una firma o escritura y la comparativa en representación de este. Por tanto, en el estudio de la proporcionalidad, el concepto de escala tiene un papel relevante y comprenderlo es importante en el peritaje calígrafo.

La proporcionalidad es una relación entre magnitudes medibles. Es uno de los escasos conceptos matemáticos ampliamente difundido en la población. Esto se debe a que es en buena medida intuitiva y de uso muy común. La proporcionalidad directa es un caso particular de las variaciones lineales. El factor constante de proporcionalidad puede utilizarse para expresar la relación entre firmas o escritos.

Por ejemplo, los metros son una magnitud y el precio es otra magnitud. Dos magnitudes son directamente proporcionales si: Al aumentar una de las magnitudes, también aumenta la otra; o al disminuir una de las magnitudes también disminuye la otra, y. El cociente de las dos magnitudes es siempre el mismo (constante).

La representación de un objeto gráficamente suele acarrear una disminución o un aumento de su tamaño original con el fin de ajustarse a un formato de espacio en un papel determinado; es lo que se llama “cambio de escala”.

En las firmas y escritura, sucedo lo mismo, al tener nuestra grafía automatizada, la memoria procedimental es aquella que posibilita una actuación, es decir, hace referencia a los hábitos motores y a las destrezas ejecutivas. Se caracteriza porque se realiza de forma inconsciente. Ejemplos de este tipo de memoria son: montar en bicicleta, escribir, nadar, etc.

En concreto, la memoria procedimental se define como la parte de la memoria que participa en el recuerdo de las habilidades motoras y ejecutivas necesarias para realizar una acción. Este tipo de memoria resulta imprescindible para automatizar el desarrollo de cualquier tipo de habilidad motora o cognitiva.

El acto de firmar siempre guarda la misma proporción ya sea en un espacio pequeño que en uno mayor.

El único que tiene la capacidad del cambio de escala en su firma o escritura es el propio autor, el falsificador nunca podrá realizar la escala de firmas en un cuerpo de escritura, mi en una falsificación.

En los cuerpos de escritura que realiza el Perito Calígrafo, es conveniente que se realicen firmas de distinto tamaño, es decir averiguar si la relación de proporcionalidad guarda la misma escala.

Todo esto se resume en el hecho de que si se trata de un mismo firmante, las firmas dubitadas  e indubitadas, deben guardar una relación de proporcionalidad directa e identificable.

Debemos considerar la proporcionalidad como un elemento indispensable para la Pericia Caligráfica, dada la complejidad matemática para descifrar la “proporcionalidad a escala”, existen aplicaciones especificas de software para pericia caligráfica,  que nos puede ayudar en esta tarea tan importante.

El Falsificador de una firma, texto…, miente.

Cada vez que nos permitimos decir, escribir, firmar una falsedad, nuestro cerebro se hace insensible a las emociones negativas que genera la falta de sinceridad. 

Cuando una persona falsifica una firma, texto, documento,  miente.

Como Peritos Calígrafos, hemos observado muchas veces, cuando realizamos un cuerpo de escritura, que hay personas que están muy nerviosas y otras que apenas se inmutan, en el siguiente artículo, podemos observar, como cognitivamente la mentira se afianza en nuestro cerebro.

Un estudio de científicos de Reino Unido revela que la repetición del engaño hace que el cerebro pierda sensibilidad ante la mentira y se produzca una escalada de falsedades. La investigación, publicada en la revista Nature Neuroscience, proporciona evidencia empírica de cómo ocurre este proceso en el cerebro.

El equipo de la University College de Londres (UCL) escaneó el cerebro de 80 voluntarios mientras participaban en tareas en las que podían mentir para obtener beneficios personales, inclusive la falsificación de firmas en un documento.

Los autores encontraron que la amígdala –una parte del cerebro asociada con la emoción– se activaba cuando las personas mentían para lograr un beneficio. La respuesta de la amígdala a la mentira disminuía con cada engaño, mientras que la magnitud de las mentiras se intensificaba.

Según explica Tali Sharot, investigador de piscología experimental y coautor del trabajo, “cuando mentimos interesadamente, nuestra amígdala produce una sensación negativa que limita el grado en que estamos dispuestos a mentir. Sin embargo, esta respuesta se desvanece a medida que continuamos mintiendo y cuanto más se reduce esta actividad más grande será la mentira que consideremos aceptable. Esto conduce a una pendiente resbaladiza donde los pequeños actos de insinceridad se convierten en mentiras cada vez más significativas”, subraya.

La falsificación y la impostura son tan antiguas como la Historia humana. De creer el relato del Génesis, Satanás logró causar la ruina de Adán y Eva convenciéndolos de que era una benévola serpiente. Algo más tarde, en Egipto y Mesopotamia se recurrió a la elaboración de diferentes sellos precisamente para evitar la falsificación de documentos. En el siglo I, precisamente para evitar que falsificaran sus epístolas, Pablo de Tarso señalaba que debían llevar una firma suya al final, firma que se caracterizaba por tener unas letras especialmente grandes, quizá consecuencia directa de una enfermedad visual del apóstol.

BREVE HISTORIA DE LA PERICIA CALIGRAFICA

FRANCOIS DE MELLE en Francia y CAMILO BALDI en Italia, se consideran como los precursores de la grafística, al inicio del siglo XVII, de hecho en Italia se encuentra la cuna de los principios de identificación de los escritos. En 1610 se publico una obra pequeña titulada IN-QUART,escrita en latín ya decadente, de la cual no existe verosímilmente más que un solo ejemplar en todo el mundo, conservado en la biblioteca de sinopsis reservada a los discípulos del maestro. En 1666 JAQUES RIVEOUX publicó el “TRATADO DE LAS INSCRIPCIONES EN FALSO”, obra que tuvo gran éxito en su época. Una segunda edición de este libro se tiró en 1673. Esta obra mucho más completa que sus precedentes llegó a ser rápidamente la carta misma de las técnicas periciales. “Su influencia durará a lo largo de dos siglos”, decía ALPHONSE BERTILLON en1898.Todos los maestros antiguos pertenecían a la corporación de los catedráticos y escritores jurídicos. Se trataba de los mismos peritos reconocidos por toda una época o por la mayor parte de las profesiones en la cual se formaban maestrías. Los archivos de GIRONDE, informan que en el año de 1689, el francés JEAN JOSSÉ estaba considerado como falsificador. Éste había elaborado numerosas falsificaciones de contratos, recibos, testamentos, actas notariales, etc., imitando perfectamente la escritura e incluso la firma delos notarios. Por otra parte, conocía los procesos de envejecimiento del papel, ya que dominaba perfectamente la técnica del lavado de los pergaminos, pero gracias a los peritos de ese tiempo, entre los que destaca ALPHONSE BERTILLÓN, fue descubierto cuando hizo pasar un salvoconducto firmado por el rey en el cual no pudo reproducir el sello de armas, ni la firma del Papa .En 1698 surgió un tratado de proceder para todas las verificaciones de escritos impugnables judicialmente. Más tarde, en 1727 Luis XV creó la REAL ACADEMIA DE LA ESCRITURA.

A partir de esa época el peritaje de los escritos entra en un periodo de controversia, pues cada perito expuso su método pero su evolución hasta nuestros días pasó por diferentes periodos que corresponden cada uno a una concepción particular. En 1774, FRANCOISE SERPILLON publicó un CÓDIGO DE LO FALSO, auténtico comentario técnico-jurídico del reglamento de 1737, el cual definía la visión del perito dentro del marco de un procedimiento de verificación de escrito, o de una inscripción en falso, e indica los diferentes aspectos de la verificación de escritos y firmas privadas en materia penal.

INICIO  CIENTÍFICO EN LA PERICIA CALÍGRAFICA

El peritaje de los documentos manuscritos, ha tomado poco a poco un carácter científico. OSBORN (1929), HILTON (1956), HARRISON (1958), LOCARD (1959) Y GAYETE (1961) publicaron los tratados ejemplares que no se limitan a los escritos, pero conciernen al conjunto de los problemas contenidos por los documentos impugnados. Durante la evolución del peritaje de los documentos escritos, los estudios permanecieron congelados durante los siguientes 30 años. Resaltando como ejemplo que la obra de EDMOND LOCARD (MANUAL DEL JUEZ), no era más que una continuación de los tomos V y VI de su tratado de CRIMINALÍSTICA de 1936 .Después de 1980 la aparición de nuevas tecnologías llamadas “INFORMÁTICA”, métodos estadísticos y las técnicas analíticas de punta, como el expert SYS (equipo de comparaciones multiespectrales) y el Docucenter (equipo de comparaciones multiespectrales), desde el año 2010 el software NEGA ACPC, en 2016 el programa especializado en pericia caligráfica forense X- HFDE para peritos calígrafos han hecho progresar gradualmente el peritaje de documentos abriendo así la era del peritaje científico.

Mario Costeja

Estudio de la rúbrica en la firma.

Podemos decir que la firma es el nombre auténtico, escrito de propia mano, esta palabra proviene del latín “firmare”, que significa afirmar, hacer valedero todo contenido antes de la firma.

La rúbrica -en latín rubrum- nació de las palabras scripsit, firmavit, recognovit (escrito, firmado, reconocido) que se escribían en tinta roja como protocolo de la firma. En su simplificación fueron reduciéndose, primero con meras iniciales, hasta llegar a constituir la rúbrica.

La rúbrica es la figura, arbitrariamente trazada que se añade a la firma, a modo de particular contraseña y como sello personal, es el único movimiento absolutamente espontáneo de la escritura, no sujeto a reglas caligráficas. Son trazos o dibujos que adornan y que suelen asociarse a la firma, representan  un conjunto de rasgos propios que desempeña un componente opcional que no puede utilizarse de manera independiente a ésta. Estos trazos, rayas, marcas, señales… cumplen el cometido de hacer que la firma no pueda ser imitada manuscritamente por otra persona, ornamento y sello de distinción propios.

Como regla general, los trazos de rúbrica son los elementos más espontáneos y más naturales, por lo tanto son los que representan mejor la personalidad gráfica del autor siendo una marca personal, porque la rúbrica es el elemento de la firma más complejo de automodificar o falsificar.

En pericia caligráfica es imprescindible el estudio de forma individual de la rúbrica del resto de la firma, los componentes de estudio y análisis técnico pericial basado en el sistema de estudio “Rasgografomotriz”: Su análisis se centra en lo que concierne al movimiento o desenvolvimiento del ductus en sí mismo, para esta investigación nos apoyaremos, en sistemas informáticos, software específico y dterminado para pericia caligráfica.

Arquitectura, estudio de la configuración, apariencia, aspecto, donde se encuentra el arranque y el final/escape (todo arranque siempre tiene un escape), la estructura de la forma si esta es elíptica, circular, envolvente, con bucles, curva, angulosa ,lazos, golpes de sable, arpones, gestos regresivos…, movimientos levógiros o dextrógiros, cambios de dirección.

Estructura, observaremos si las rúbricas indubitadas guardan un orden o similitud entre ellas, si el firmante es metódico, si es una rúbrica sistematizada, si podemos decir si es una rúbrica meticulosa. En las firmas dubitadas de una persona sana, la carencia de orden en la estructura gráfica, nos puede advertir de una posible falsificación o automodificación, si apreciamos torsiones, temblores, sacudidas, retoques, correcciones, falta de espontaneidad, debemos desconfiar y analizar en profundidad.

Dimensión, La firma y más aún la rúbrica es un automatismo del sistema    neuromuscular, estableciendo este, patrones dimensionales recurrentes y constantes (homotectia Gráfica), la pauta de la misma, guardan una escala de proporcionalidad dimensional, que NO son susceptibles de ser imitados o falsificados.

Presión, En la rúbrica, solemos apreciar distintas presiones, saturación de tinta y la mayor o menor profundidad de los trazos, esto nos indica una presión del útil escritural sobre el soporte, deberemos observar y cotejar, si entre la firmas dubitadas e indubitadas, las presiones, o las posibles cargas de tintas se dan en el mismo punto y emplazamiento.

 Velocidad, es la rapidez con que se ejecutan los trazos, cada individuo realiza la rúbrica con una velocidad gráfica particular, es de vital importancia al examinar la rúbrica el grado de constancia con que se imprime esa rapidez.

Continuidad/Intermitencia, la continuidad significa que un levantamiento del útil escritural en el trazado de la rúbrica, se convierte en una intermitencia, llamaremos rúbrica continua aquella cuya línea pueda trazarse sin levantar el útil del papel y se realice en un solo trazo. La rúbrica que se ejecute con más de un levantamiento, se le denomina rúbrica con Intermitencia.

 Dirección, es recorrido de la rúbrica a través del papel, puede ser ascendente, horizontal o descendente, dentro de este grupo y si la rúbrica es tan solo una línea se observarán si son cóncavas, convexas o con ondulaciones.

 Mario Costeja

DATACIÓN DE TINTAS Y PAPEL

Los peritos calígrafos documentólogos, solemos tener consultas al respecto de la datación por medio de tintas y papel, debemos aclarar a los clientes la inviabilidad actual de este práctica.

DATACIÓN TINTAS:

En la actualidad datar la fecha de un escrito a través de la tinta o del papel es una cuestión, con poca fiabilidad y fácilmente rebatible.

El perito riguroso, de acuerdo con las policías de todo el mundo y la comunidad científica forense, es conocedora de que no se puede determinar ningún método fiable de análisis forense dirigido a la datación de las tintas sobre papel, en la actualidad no existe ningún método que sea validado internacionalmente.

Los procesos de envejecimiento que sufre una tinta tras ser depositada en el papel están interrelacionados entre sí. Se hace difícil establecer compartimentos estancos en la clasificación, las resinas polimerizan reteniendo cantidades de compuestos volátiles en su secado e interactuando con el papel, y los tintes interaccionan con las resinas formando uniones entre ellos.

Debemos distinguir previamente entre dos clases de edades, la llamada “edad absoluta ”y la “edad relativa”, siendo la primera la que corresponde a una tinta desde su fabricación, y la segunda es la antigüedad de una tinta con respecto a otra, pues como sabemos, una tinta puede tener un proceso natural de envejecimiento dentro del frasco en el que se envasa y, por consecuencia, aun cuando determinados la edad, esta no puede estar acorde con el documento en cuestión, tomando en cuenta, además del proceso que sufre con la exposición a la luz, aire, o sea factor ambiental, humedad, etcétera, lo que nos indica que esto es solo un factor teórico.

Las fases de degradación de las tintas son provocados o catalizados por agentes procedentes del exterior tales como: la humedad ambiental, sobre todo si se trata de un material con carácter higroscópico; la temperatura, que es una de las principales causas de deterioro de los materiales, debido principalmente a que el calor provoca un aumento de velocidad de las reacciones de degradación; la radiación, toda vez que la energía recibida permite alcanzar la energía de activación de numerosos procesos químicos, lo que acelera las reacciones químicas y las rupturas de enlaces. La radiación permite la formación de radicales, producidos a partir de la ruptura homolítica de enlaces (principalmente carbono-hidrógeno y carbono-oxígeno, conjugados a dobles enlaces). Estos grupos químicos son muy reactivos, conduciendo rápidamente al deterioro de los materiales, medianterupturas, reorganizaciones y la formación de oligómeros y polímeros, que pueden hacer variar de forma drástica las propiedades de los materiales. En el ambiente existen otras sustancias contaminantes que pueden resultar dañinas y degradar las tintas.

 La detección de factores que pueden verse afectados por multiplicidad de variables referentes a las condiciones de almacenamiento del documento (tales como humedad, sequedad, iluminación, calor, frio, etc.) y caracteristicas del soporte (acidez del papel, grosor del mismo, etc.) y la tinta en si, los cuales repercuten en la exactitud de las conclusiones arribadas.

Por lo anterior, la determinación de la antigüedad de tintas es aun un estudio no categórico.

La tinta inicia con un proceso de secado con respecto al tiempo, debido a la perdida por evaporación y desprendimiento de los solventes volátiles, que deriva en la degradación de los colorantes y un endurecimiento por oxido-reducción de las resinas de cohesión molecular, con base en la polimerización de las mismas. La cuantía remanente del conjunto de solventes, deja un residuo que se volatiliza lentamente, pudiendo ser detectado al transcurso anteriores a los dos años, sin embargo la cantidad contenida de éste en un trazo, únicamente puede ser utilizado para su datación si es monitoreado y/o generado algún valor, mismo que es una variable independiente de la cantidad de muestra extraída (masa) y formulación de la tinta dentro de la investigación.

  Lo que actualmente si se puede  comprobar, es si una firma o texto escrito con tinta, es reciente, máximo 90 días o antigüedad superior a tres años, por la detección de los disolventes y otros.

 Sin embargo sí hay situaciones en las que puede aclararse con bastante certeza a qué fechas de la vida pertenece una firma o escrito. El estudio se basa en que vamos variando de escritura a lo largo de los años. En algunos casos la evolución es más rápida y patente, en otros, tal cambio es menos perceptible.

El perito compara firmas y/o escritura de la persona a lo largo del tiempo, y comprueba las variaciones que los trazos han sufrido en el transcurso de los años. De esa forma, consigue enclavar la firma o escrito cuestionado, en una franja de tiempo donde el paralelismo gráfico es mayor.

DATACIÓN PAPEL:

 Datar un papel o datar un documento de la década del siglo pasado a la actualidad es prácticamente imposible porqué ha podido permanecer guardado durante años desde su fabricación hasta que ha pasado a formar parte del documento, y actualmente los componentes químicos del papel y sus microbicidas hacen que el papel no se deteriore como antaño y factores externos de como se guarda el documento,  pueden influenciar su proceso de envejecimiento como son las circunstancias ambientales: luz, humedad, temperatura, y condiciones de almacenaje del documento.

Los papeles actuales desde la década aprox. de los 90´ NO contienen cloro para blanquear.

Para datar por comparación con un estándar es necesario poseer una extensa base de datos de fabricantes de papel a nivel mundial actualizada para poder cotejar y analizar químicamente, cosa inexistente en la actualidad.